La región íntima es una de las partes más sensibles del cuerpo femenino y cualquier señal de alteración, dolor o molestia merece mucha atención, con el fin de evitar el empeoramiento del caso y futuros problemas de salud.
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A diferencia de las cólicas menstruales, algunas mujeres pueden sentir dolor en la vulva (parte externa del órgano genital) y/o en la vagina (parte interna) y esta sensación es alarmante; a continuación, veremos cinco posibles motivos por los cuales esto puede ocurrir.
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Infecciones y ETS
Hinchazón, picazón y dolor, especialmente durante la relación o al orinar, pueden ser consecuencias de infecciones fúngicas. También deben considerarse las Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS), en especial el herpes genital, que causa graves llagas dolorosas y deja la piel extremadamente sensible, especialmente en contacto con la orina, y puede durar hasta 14 días. Otras ETS, como la gonorrea, clamidia y tricomoniasis, también pueden causar dolor, picazón y ardor vaginal, todas estas enfermedades son altamente contagiosas.
Vulvodinia
La vulvodinia es una condición de dolor y/o molestia crónica en la vulva, que dura al menos tres meses. La causa subyacente es desconocida y provoca relaciones sexuales dolorosas, ardor, picazón, enrojecimiento y sensibilidad en la región.
Quiste de Bartholin
Los quistes de Bartholin son comunes. Esta condición forma un nódulo lleno de líquido en las glándulas de Bartholin, responsables de la lubricación vaginal. Normalmente, no van acompañados de dolor y no siempre requieren tratamiento. Sin embargo, en caso de infección puede dejar la región sensible, con pus y dolorida, síntomas que suelen aparecer principalmente cuando se está sentada, caminando o durante el sexo.
Endometriosis
La endometriosis ocurre cuando el revestimiento uterino crece fuera del útero. Esta condición tiene una serie de síntomas que se intensifican durante la menstruación: dolor en la pelvis, vagina y vulva; dolores durante las relaciones sexuales; ciclos menstruales irregulares, intensos y dolorosos; estreñimiento intestinal; náuseas y dolor al orinar. También puede desencadenar infertilidad.
Los estudios indican que existe la posibilidad de desarrollar cáncer de ovario en mujeres con endometriosis. Los síntomas más comunes de la enfermedad incluyen: dolor de estómago persistente, hinchazón abdominal, deseo de orinar con más frecuencia, dificultad para comer o sentirse saciada.
Disfunciones del suelo pélvico
Las disfunciones del suelo pélvico también pueden afectar la función urinaria e intestinal, haciéndolas más dolorosas. Además, es común el espasmo en la pelvis como reflejo de otros tipos de dolor.
En todas las condiciones mencionadas anteriormente, basándonos en información de “Health Essentials”, son alarmantes y es indispensable la consulta con un ginecólogo. Solo a partir de exámenes, el profesional podrá recomendar el mejor tratamiento individual de acuerdo con tu caso, que puede incluir medicamentos y/o terapias.
